En esta vida de turbulencias, no sabemos meditar, nuestra mente está hecha un lío, tenemos adicciones, nos perdemos en el hacer.
En una clase de Kundalini hay mucho dinamismo: nos movemos, subimos, bajamos, cantamos, bailamos,estamos en silencio….no nos da tiempo a aburrirnos. Esa es la ciencia del Kundalini. Y mientras estamos entre asana y asana (postura), hay breves momentos de silencio ,y entretanto nuestra mente, que es un gran caos queda entretenida, meditamos. Y eso empieza a generar en cada uno de nosotros distintos efectos…
En general el yoga es una tecnología tan amplia, tan holística, tiene muchísimas cosas que ofrecernos, casi a cada persona le puede ofrecer algo. Es una escuela de vida: con yoga aprendemos a respirar, a hacer el amor, a comer, a estirarnos, a descansar en el trabajo, a dormir… ¡a todo!
En realidad,el yoga encamina a la iniciación del despertar de la conciencia. Pasamos de estar zombis, dormidos,apesadumbrados, compensando, solapando, viviendo como podemos, a despertar a la vida consciente, a iluminarnos.
El ser humano que ha despertado, es un ser humano normal, solo que hay un deleite de vivir! . Es una relación con Dios,entendiendo por Dios al amor perfecto, e incondicional.
La finalidad es que, a medida que vas practicando yoga, pasan cosas que te hacen despertar. Y ahí empieza una vida consciente, feliz, plena, responsable. Irás teniendo”insides”, experiencias de plenitud de verdad.
También existe una disciplina en el yoga: cuando crees que no te sirve, sigue; cuando te irías corriendo, sigue.
Eso es lo que aprendemos en la esterilla, a seguir más allá de lo que al ego le gustaría.
Ananda
